martes, 30 de agosto de 2011

Los mayores y las fuentes de información de salud en Internet


Leo en un estudio publicado este año (J Med Internet Res 2011;13(1):e19) que la confianza de la población de más edad (por encima de los 50 años) en Internet como fuente de información sanitaria está estrechamente ligada a la utilización que, en general, hacen de Internet. La conclusión es bastante evidente y no tiene nada de especial. Sin embargo, según los autores, esta estrecha relación hace pensar que simplemente desarrollando y promocionando portales sencillos y fiables de información sanitaria podría aumentarse significativamente esa confianza. De lo que se trata entonces es de investigar y definir cómo deberían ser estos portales en cuanto a diseño, contenido y funciones para optimizar su utilidad. Este es el reto y aquí es donde entramos en juego los profesionales sanitarios. En la actualidad disponemos de todo un abanico de herramientas 2.0 que nos permiten trabajar de forma colaborativa entre profesionales de la salud formando equipos multidisciplinares sin limitaciones de tiempo ni de distancia geográfica. Creo que es un reto muy asumible coordinarnos para buscar, recopilar, discutir y hacer digerible una información sanitaria rigurosa, veraz, contrastada, actualizada y comprensible para el ciudadano, generada por equipos de expertos que garanticen conocimiento, objetividad, independencia y transparencia. Y todo ello ponerlo a disposición de nuestros pacientes/ciudadanos en portales web con un diseño sencillo y fácilmente accesible y navegable. Existen ya muchos profesionales de la salud trabajando en ello, pero creo que ganaríamos mucho aplicando un enfoque colaborativo y multidisciplinar. Y, en los tiempos 2.0 que corren, es lo que toca...

Salu2

jueves, 25 de agosto de 2011

Conciliación de los tratamientos




Recientemente se ha publicado un interesante artículo en JAMA (JAMA 2011;306(8):840-847) en el que se estudia el riesgo que tienen los pacientes con tratamientos crónicos (estatinas, antiagregantes, levotiroxina, inhaladores, antiácidos) de sufrir una discontinuación accidental de sus tratamientos al ser dados de alta de un ingreso hospitalario agudo, riesgo que se incrementa en caso de que el ingreso haya sido en la UCI. Es decir, el paciente ingresa con un tratamiento crónico que puede ser modificado o suspendido durante su ingreso, pero que al ser dado de alta no se le vuelve a prescribir por error. Evidentemente esto genera un riesgo que puede ser más o menos importante en función del tratamiento del que se trate y de la patología y estado clínico del paciente.

Esta situación ha sido puesta de manifiesto en numerosos estudios antes y, de hecho, en los hospitales los farmacéuticos llevamos ya varios años trabajando en lo que se ha denominado "conciliación del tratamiento", que viene a ser una valoración del listado completo y exacto de la medicación previa del paciente con la prescripción médica después de una transición asistencial (ingresos y altas), de modo que si se encuentran discrepancias, duplicidades o interacciones entre los tratamientos crónicos y hospitalarios son comentados con el médico y modificados si procede.

Numerosos estudios demuestran el impacto positivo de este proceso de conciliación. No obstante, me parece importante destacar el papel que también puede y debe jugar el propio paciente (y sus familiares o cuidadores) comprobando siempre posibles discrepancias en su tratamiento antes y después de un ingreso hospitalario y consultar con su médico cualquier duda al respecto. Como en cualquier otro aspecto relacionado con su salud, la implicación del paciente en su propio tratamiento contribuirá a conseguir la mayor efectividad y seguridad posible del mismo siendo, además, el propio paciente el más beneficiado.



martes, 23 de agosto de 2011

El regreso

Hola a todos. Acabo de regresar de mis vacaciones, durante las cuales he tratado de hacerme un "lavado electrónico" y desconectar en lo posible de ordenadores y demás dispositivos electrónicos. Y, la verdad, creo que he conseguido hacerlo en buena medida (aunque no del todo) y he visto que es incluso saludable. Por eso durante las tres últimas semanas la actividad del blog, de la página de Facebook y de la cuenta Twitter ha estado bajo mínimos. Ahora vamos a ir volviendo poco a poco a la normalidad y retomando esta vía de comunicación con más fuerza que nunca.

Como en el último post os hablaba de las obras que íbamos a realizar en nuestra unidad, os muestro un par de fotos de cómo ha quedado la zona de dispensación:



Sinceramente, creo que todos (pacientes y profesionales que trabajamos en la UFPE) hemos ganado con el cambio.

Un saludo.